viernes, 10 de noviembre de 2017

Mi amiga Hazel y su plantita


Cuando vivia en Caracas, trabajaba para una empresa que hacia transformadores eléctricos, de esos que vemos en los postes en las calles. Cuando empecé a trabajar en esa empresa, que se llamaba "Manufacturas Eléctricas de Venezuela, C.A. (MEVENCA) era una fábrica relativamente pequeña. Esta fábricaba sus transformadores, mediante un acuerdo con la empresa "Allis Chalmers" de Pittsburgh, PA. Nuestra empresa le pagaba a la Allis Chalmers una regalía por cada transformador qee haciamos y vendiamos en Venezuela.

A medida que nuestros transformadoress se hacian conocidos por su buena calidad, nuestros clientes nos compraban más y más unidades, asi que la empresa decidió invertir sus ganancias en una fábrica enorme, con la maquinaria más moderna del mercado. Se compró un terreno en Cúa, Estado Miranda, (como a 2 horas de Caracas, por cierto el camino era precioso, una carretera en medio de unos cerros verdes, lo único que no me gustaba era que a medida que dejabamos Caracas, el calor se hacia insoportable) y así, empezaron la contrución. Para ese entonces, nuestra junta directiva, también decidió, comprarle el "know how" (es decir la tecnologia que habiamos estado usando desde que la empresa empezá a producir sus transformadores), pera hacer nuestros transformadores, completamente venezolanos. Tengo entendido que posteriormente la empresa Allis Chalmers la compró la empresa alemana Siemens, quienes eran nuestros clientes en Venezuela y nos compraban un montón de transformadores.

Ya que ya no teniamos la ayuda tecnica de Allis Chalmers, nuestra empresa contrato como Consultor Técnico, al Sr. Ernie Goodman, Ingeniero Electricista, recien retirado de Allis Chalmers, asi que cuando nos encontrabamos con algún problema, llamabamos al Sr. Goodman y el, que era un experto, nos solucionaba el problema enseguida. Cuando nuestra fábrica estuvo lista, mi jefe, que era el Presidente de la empresa, invitó al Sr. Goodman y su esposa Hazel, a que vengan para la inauguración de la nueva fábrica y ellos vinieron. Asi fué como conocí a mi amiga Hazel. Eran una parejita linda, mayores de edad, Hazel me llevaba como 20 años, pero nos hicimos amigas enseguida. Me acuerdo, que durante el tiempo que estuvieron en Caracas, mientras mi jefe y el Sr. Goodman se iban a la fábrica, mi jefe me encargaba a Hazel y yo feliz, porque me la llevaba a pasear en mi carrito viejo y luego a almorzar en algun lugar rico y terminabamos en mi casa. En ese entonces mi hija era chiquitita é iba a su guarderia de niños desde las 8 de la mañana hasta las 5:30 de la tarde. Un día Hazel me a compaño a recogerla, y se enamoro de mi hija y mi hija e ella, quizas su instinto de niña le decia que Hazel era una abuelita.

Y asi nos hicimos amigas, Hazel y yo. Cuando me vine a California, seguimos escribiendonos y un día Hazel y Ernie, me dieron la sorpresa y vinieron a Los Angeles a visitarme antes de irse a San Francisco, que alegria verlos nuevamente, me acuerdo que les hice un menú peruano con Causa y Lomo Saltado, y leche asada. La pasamos tan lindo. me contaron que su hijo mayor, que vivia en Texas, se habia casado con una chica que tenia una hijita de un previo matrimonio, Hazel hablaba con tanto orgullo de "su nieta", asi de grande era su corazón. Me contó que, como su nieta era peliroja, le habia cosido un trajecito igualito al de la "Pequeña Annie" que en ese entones se estaba presentado en Broadway y me regalo una fotito de la niña con su vestidito rojo y cuellito blanco, esa niña es ahora una mamá de varios niños. ¡Como pasa la el tiempo!

Un día me llegó una notita de Hazel, avisandome que su esposo habia muerto. Me dió mucha tristeza, sobretodo tamibién, porque sus dos hijos vivian lejos de ella, y ella iba a estar solita todo el tiempo. Gracias a Dios Hazel era bien sociable y siempre me contaba que era miembro de un montón de clubs, uno de era de lectura, otro era de manualiades y siempre se veia con sus amigas. Por cierto una vez me contó, que desde que sus hijos eran chicos e iban al colegio y su esposo estaba en el trabajo, ella aprovechaba la hora dl almuerzo para juntarse con sus amigas, hacer sus compras, en fin, siempre tenia algo que hacer al medio día. Cuando Ernie se retiró del trabajo, entonces ella le tenia que hacerle almuerzo y muchas veces no podia juntarse c on sus amigas y hacer sus compras u otras actividades de medio día. Asi que le dijo a su esposo que tenia algo muy serio que decirle y que por favor no lo tome a mal. Ernie se quedó sorprendido é intrigado de lo que iba a decir Hazel, y ella le dijo "Cuando nos casamos el sacerdote nos dijo que nos casaba de por vida para amarnos en salud y en enfermedad, en riquezao y en pobreza, pero nunca nos dijo "los caso para que esten juntos a la hora del almuerzo, asi que vas a tener que buscarte un amigo ó un "hobbie" y dejarme mi medio día libre, porque esa es la hora que hago mis mandados y también me junto con mis amigas". Me conto Hazel que, Ernie se rió tanto que hasta la dolió la barriga. Asi que desde ese día su esposo se iba con algún amigo o hacia alguna cosa en su taller.

Desde que Hazel se quedó viuda, yo empece a llamarla todos los sábados, primero llamaba a mi amiguita Astrid en Lima, y luego era Hazel. Al menos las acompañaba un ratito por teléfono. ¡Mis queridas amigas!

En Navidad, Hazel y yo cambiabamos regalitos que haciamos nosotras mismas, por ejemplo le tejí una bufanda negra y le puse flecos y mostacillas negras, me quedó bien bonita y a Hazel le gusto mucho, y ella una vez me envió una muñequita que ella habia hecho en sus clases de manualiades, la habia vestido de bailarina de ballet, mi muñequita tan linda, esta en mi mesa de noche.

Hace dos años, como en noviembre, Hazel me envió una plantita, me dijo, "vas a recibir una maceta, empieza a regarla apenas te llegue y verás", asi lo hice y a la semana empezaron a salir unas ramitas, que fueron creciendo y creciendo hasta que les salieron unas florecitas blancas de lo más lindas. Mis plantitas me duraron hasta casi Año Nuevo y murieron, asi que las corte y deje los bulbos en la tierra. Más o menos en marzo, en una de las llamadas que le hice a Hazel, me contó que tenia cancer y que le habian dado 3 meses de vida. Que no quiso que le dieran quimoterapia "porque ya tengo 91 años, y de algo tengo que morirme". La noticia me dió mucha tristeza, me dijo también que su hijo, que vive en Texas, queria que ella se mude allá con ellos, para poder cuidarla hasta que le llegue la hora. Me prometió que me iba a llamar para darme su nueva dirección de Texas. Pero nunca lo hizo, trate de llamar a su antiguo teléfono, pero me salió un mensaje diciendo que "ese número ya no estaba en servicio". En Junio del año pasado me llegó una nota del hijo de Hazel, avisandome la muerte de su madre. En ella me decia que "ella murió pacíficamente, rodeada del cariño de sus hijos".

Asi se me fué mi amiga Hazel, pero me dejó su plantita, que el sábado pasado encontré que le estan volviendo a salir las ramitas, asi que empece a regarla nuevamente y ya estan los tallitos grandes, un poquitito más y le estaran brotando las florecitas blancas. Gracias, querida Hazel, tu regalo se renueva cada año, ¡descansa en paz!

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