Las elecciones peruanas

Hoy es el dia de "Corpus Cristi" un dia muy especial para mi. Cuando era chica y vivia en Chosica, todos los colegios saliamos en este dia en procesión. Las niñas de mi colegio, todas vestidas con nuestro uniforme blanco de gala, saliamos desde la Iglesia de Santa Rosa, cantandole a la Santísimo que iba en manos del padre de la parroquia caminando con nosotros por todo el rededor del parque. Las niñitas más pequeñas iban delante del Santisimo tirandole flores en su camino. Recuerdo esto que pasó hace 74 años tan clarito, como si fuera ayer.

Ayer fuí a misa por primera vez en la iglesia, se me hizo un nudo en la garganta poder recibir mi comunión con el cuerpo de Cristo verdadero, luego de más de un año de comulgar espiritualmente.

Hoy domingo, me levante tempranito ,y escuche mi misa nuevamente por TV y se la ofrecí al Señor Jesus, para que salve a mi Perú del comunismo.

Hay muchas cosas que le pedimos a Dios, un sacerdote, una vez nos dijo en un sermón, que Dios nunca nos dá un NO rotundo. Aveces nos dice "esperate, te lo daré más adelante", o quizas nos diga "a cambio de lo que me pides te voy a dar esto otro". Otras veces no nos dice nada, pero al cabo del tiempo, nos da su respuesta, quizas, cuando ya nos habiamos olvidado de lo que le habiamos pedido. En el caso de las elecciones peruanas, la respuesta a mi pedido vendrá en unos días, quizas me conceda mi pedido, ó quizas nó. A lo mejor tenemos que sufrir la destrucción de nuestro país, como nuestros hermanos han visto a Venezuela.

El peor castigo sería que la dictadura en nuestro pais durara 70 ú 80 años como en Cuba. Al final, tal como ha pasado en Cuba, nuestros hijos y nietos, estaran tan acostumbrados a ser esclavos que nunca sabrán la diferencia. Peor aún, en el Caso de Venezuela, si alguna vez el gobierno de Maduro terminaría, tomará, por lo menos unos 50 años, y mucho sacrificio para volver a poner a Venezuela como era antes. Aunque espero que sea libre y democrática, pero que no sea como era antes. Los problemas que causaron esta dictadura, han sido que habia un grupo de gente que lo tenia todo, mientras el resto de la población no tenia nada. Quizas la nueva Venezuela, haya aprendido su lección y que sus gobiernos se ocupen de TODOS, no sólo de algunos cuantos. Desgraciadamente, el mismo problema se repite en Perú unos tienen mucho y el resto generalmente en las provincias, no tiene nada,

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Mis bultitos

 Ahora que hemos perdido a nuestra querida amiga Quelita, me he puesto a pensar que quizas yo sea la que sigue. El miercoles pasado me hicieron unas radiografias, ó sabe Dios como se llama esa máquina en la que me metieron, mientras hacia su tarea de inspeccionarme, sonaba como un avión al inicio de la pista, donde toma fuerza para decolar, (¿que hubiera sido, si de verdad la máquina decolaba conmigo, por el techo del hospital y yo terminaba en un vuelo directo al otro mundo sin darme cuenta?).

La cosa es que tengo dos bultos a los lados de mi cuello, el de la derecha ya es amigo mio desde hace como 2 años, pero no le daba importancia porque no me duele nada, pero tuve que ir al doctor porque por el lado izquierdo me esta saliendo otro, que todavia está chiquito, y tampoco me duele nada, pero es mejor que me los vean, aunque ya le dije a mi médico que si es algo malo, no me voy a hacer nada, se quedaran conmigo hasta que me muera.Ya tengo 81 años y de cualquier cosa puedo morirme, no hay problema.

Por otro lado le pido a Dios que no me deje vivir hasta los 100 años como mi mamita, ella nos tuvo a mi hermana Elsa y a mi para cuidarla, pero yo tengo sólo una hija, que tiene que trabajar para pagar sus gastos y dos nietos hombres. Una vez el mas chiquito Isaac, me dijo "abuela yo quiero que nunca te mueras", y le contesté "Tengo que morirme alguna vez, no tengo a nadie que me cuide cuando este viejecita y no pueda hacer las cosas por mi misma, tu madre tiene que trabajar y ustedes despues de la escuela también tendran que trabajar para ganarse la vida" y me dijo, "no abuelita, yo te cuidaré" Y le dije "de ninguna manera, ni tu ni tu hermano me van a lavar el poto". Y nos atacamos de la risa, pero esa es la mi realidad.

Asi que me he puesto en manos de Dios, quien me ha cuidado desde que nací y todavia, de vieja me sigue cuidando. No me aferro a la vida, estoy en paz con Dios y conmigo misma. No soy una santa, he cometido errores como todo el mundo, pero siempre he tratado de no hacerle daño a nadie, y de pasar por este mundo sin dejar huella mala, como los indios de nuestra selva que han vivido en el Amazonas por siglos y nisiquiera se nota. Somos "los civilizados' los que botamos basura, destruyendo la selva cortando y quemando sus arboles por dinero o por drogas. Espero que al morirme, mi hija y mis nietos me extrañen, quedaré en su recuerdo mientas ellos vivan y luego pasaré al olvido como todo pasa en este mundo.